a los resfríos querían darle una solución.
De sus artes mágicas echaron mano,
y este bello cuento inventaron.,
para aliviarnos si nos ponemos malitos
y la nariz se llena de moquitos.
Tihada dijo las palabras mágicas,
el Hadita las dibujó,
y Ana lo mezcló todo
en el puchero del ordenador.
Aquí tenéis el resultado,
no lo encontrareis en cualquier lado,
pues ni en farmacias ni en boticas
hay solución más bonita.