En una entrada anterior ya hablamos de la importancia y beneficios del aprendizaje cooperativo entre los alumnos. Desarrolla las habilidades sociales, favorece la autoestima, la integración en la clase,la cooperación entre todos para sacar un proyecto adelante, elimina la competitividad por ser el primero o el mejor de la clase, desarrolla la empatía..y así podríamos ir enumerando aspectos hasta hacer una lista interminable.
Hoy me quiero centrar en las aulas de infantil y ver de qué manera se puede hacer este tipo de aprendizaje con estos niños tan pequeños. Cualquiera que tenga un poco de experiencia en educación se dará cuenta de que muchas veces la pura intuición nos lleva a desarrollar métodos o estrategias, que después vemos publicados en libros de pedagogía como algo innovador y novedoso.Por eso es posible que algunas de las estrategias que os doy aquí ya las esteis practicando en vuestras aulas y con vuestros niños, pero nunca está demás darles un enfoque diferente y añadirle nuevos detalles o aspectos.
La adopción de roles
Distribuir roles entre los niños es la mejor manera de comenzar a promover la cooperación entre ellos. El rol debe tener una función muy concreta si los niños son muy pequeños, con el tiempo se pueden ir incorporando nuevas tareas y funciones según la edad y capacidad de los alumnos. Algunos de los posibles roles para Educación Infantil son : el encargado de los abrigos, el encargado de la mesa, el de la limpieza, el de las filas, el de la ventana, el del baño, el del silencio y orden en clase...Cada docente estudiará los que sean más idóneos para su clase.
Cada rol tendrá una tarjetita identificativa que se colocará el niño que lo esté desempeñando, explicándole bien cuál es su función y cómo debe hacerla. Es aconsejable que los roles se vayan rotando para que todos los niños pasen por todos. Al final de la semana, si su trabajo ha sido bueno, se les puede recompensar con una medalla, que llevarán el viernes a casa para compartir sus éxitos con la familia..
Yo soy tú, tu eres yo
El docente hace una pregunta adecuada al nivel de los niños, puede ser sobre el tema que se esté trabajando en clase.Los niños durante un par de minutos piensan la respuesta individualmente, después se agrupan con el compañero que tienen más cerca y se explican la respuesta mutuamente. Por último el docente hace una rueda de respuestas en clase, y el alumno, en lugar de explicar su respuesta explica la de su compañero.
Adivina
El docente pinta cinco elementos en la pizarra: un sol, una hoja, un cuadrado...Cada niño elige dos elementos y los dibuja libremente en un folio, cuando termina se lo entrega al profesor. Éste elige un niño al azar que elige un dibujo cualquiera y explica a sus compañeros el contenido. Éstos tiene que adivinar con las explicaciones quién es el niño que lo ha hecho.
Tarjetas similares
Se entrega a cada niño una tarjeta con un dibujo relacionado con el vocabulario que se está trabajando en clase. cada uno debe pertenecer a un grupo o familia de palabras ( oficios, animales, frutas...). Los alumnos deben moverse por la clase buscando a los compañeros que tienen una tarjeta de la misma familia, sin hablar ni enseñar su dibujo.
Estos son solo cuatro ejemplos, una pequeña muestra de lo que es esta manera de aprender. Por supuesto que se pueden variar y adaptar todo lo que se necesite hasta dar con la fórmula acertada para nuestro grupo.Y a partir de ellos pueden surgir otros, solo hace falta conocer un poco el planteamiento teórico y después dejarse llevar por la intuición.
